Preparar un Gin Tonic perfecto puede ser un arte, pero con algunos consejos sencillos y una buena selección de ingredientes, cualquiera puede lograrlo. Este cóctel, clásico y elegante, se ha ganado un lugar especial en el corazón de muchos amantes de las bebidas.
A continuación, conoceremos un poco más acerca de esta bebida y te explicaré cómo prepararla para que puedas disfrutarlo como todo un experto y dejar a todos con la boca abierta, convirtiéndote así en el alma de las fiestas.
La historia del Gin Tonic.
El Gin Tonic tiene una historia interesante que se remonta al siglo XIX.
Ya en tiempos pasados, los soldados británicos en la India colonial utilizaban la quinina, el componente amargo de la tónica, para prevenir la malaria. Para hacerla más agradable al paladar, comenzaron a mezclarla con agua, azúcar, lima y ginebra: así nació el Gin Tonic.
Con el tiempo, esta bebida evolucionó y se convirtió en un cóctel con una fama más que merecida en todo el mundo, conocido por su sabor refrescante y su capacidad de adaptación con otras bebidas.
Ingredientes necesarios.
- Ginebra de calidad: la base de cualquier buen Gin Tonic es una buena ginebra. Existen muchas marcas y tipos de ginebra, cada una con sus propias características y botánicos. Algunas de las más populares son Tanqueray, Bombay Sapphire, Hendrick’s y Beefeater. La elección depende de tu gusto personal, pero siempre es recomendable optar por una ginebra premium.
- Tónica premium: al igual que la ginebra, la tónica es crucial. No todas las tónicas son iguales; algunas pueden ser muy dulces o muy amargas. Marcas como Fever-Tree, Schweppes Premium Mixer o 1724 Tonic Water son elecciones excelentes; prueba todas las opciones diferentes que puedas para encontrar la que más te guste.
- Hielo: el hielo es fundamental para mantener tu Gin Tonic frío y refrescante. Lo ideal es usar cubitos grandes y sólidos, ya que se derriten más lentamente y no diluyen la bebida tan rápido.
- Guarniciones: las guarniciones no solo aportan sabor, sino que también añaden un toque visual atractivo. Algunas de las guarniciones más comunes son rodajas de limón, lima, pepino, bayas de enebro, hojas de menta, y rodajas de pepino. La elección de la guarnición puede complementar los botánicos de la ginebra que estés utilizando.
¿Cómo lo preparamos?
- Elige un vaso adecuado: el vaso ideal para un Gin Tonic, según afirman los profesionales de Giona Premium Glass, es un vaso de balón o copa de vino grande. Este tipo de vaso permite que los aromas de la ginebra se liberen y mejora la experiencia de beber.
- Enfría el vaso: antes de empezar a mezclar, enfría el vaso llenándolo con hielo. Revuelve los cubitos dentro del vaso y luego deshazte del agua que se haya derretido. Esto asegurará que tu Gin Tonic se mantenga frío por más tiempo.
- Añade la ginebra: vierte la cantidad de ginebra que prefieras. La proporción estándar suele ser 1 parte de ginebra por cada 3 partes de tónica, pero esto puede ajustarse según tu gusto. Normalmente se utilizan entre 50 y 60 ml de ginebra.
- Añade la tónica: abre la botella de tónica justo antes de usarla para que mantenga su efervescencia. Vierte la tónica lentamente sobre la ginebra, utilizando una cuchara mezcladora para minimizar la pérdida de burbujas. La proporción puede variar, pero generalmente es de 150 a 180 ml de tónica.
- Guarniciones: añade la guarnición elegida. Si usas cítricos, exprime ligeramente una rodaja para liberar los aceites esenciales antes de dejarla caer en el vaso. Si usas bayas de enebro, puedes machacarlas un poco para potenciar su sabor.
- Revuelve suavemente: mezcla suavemente la bebida con una cuchara larga para combinar los sabores sin perder demasiadas burbujas.
Consejos extra para conseguir el mejor Gin Tonic.
- Experimenta con ginebras y tónicas: cada ginebra tiene su perfil de sabor único, influenciado por los botánicos utilizados en su destilación. Del mismo modo, cada tónica puede aportar diferentes notas de sabor. No dudes en experimentar con diferentes combinaciones para encontrar tu Gin Tonic perfecto.
- Ajusta las proporciones a tu gusto: si prefieres un Gin Tonic más suave, añade más tónica. Si te gusta más fuerte, reduce la cantidad de tónica o aumenta la de ginebra.
- Prueba con nuevas guarniciones: aunque las rodajas de limón y lima son las más comunes, otras guarniciones pueden ofrecer una experiencia diferente. Por ejemplo, la ginebra Hendrick’s se suele combinar con pepino para resaltar sus notas florales. Las bayas de enebro, las fresas y las hierbas aromáticas como el romero o la albahaca también pueden ser opciones interesantes.
Recetas para inspirarte.
- Gin Tonic clásico:
- Ginebra: Tanqueray.
- Tónica: Schweppes Premium.
- Guarnición: Rodaja de limón.
- Gin Tonic floral:
- Ginebra: Hendrick’s.
- Tónica: Fever-Tree Elderflower.
- Guarnición: Rodaja de pepino y pétalos de rosa.
- Gin Tonic cítrico:
- Ginebra: Bombay Sapphire.
- Tónica: 1724 Tonic Water.
- Guarnición: Rodaja de lima y hojas de menta.
- Gin Tonic de bayas:
- Ginebra: Beefeater.
- Tónica: Fever-Tree Mediterranean.
- Guarnición: Bayas de enebro y fresas.
